martes, 12 de enero de 2010

 
qué será de mí en los entierros que anhele míos
sin tierra que me paralice ya la boca parlanchina
sin flor que vaya ajándose a golpe de visita no regada
sin foto que me tenga eternamente sonriendo
habré de guardarme tanta envidia en el abrigo
que no parezca que me mofo del caído
queriendo para mí su suerte última
adelantando los eones que no son más que pocos días
cansada como estoy de la estatura,
de los panes, de las siestas y la charla
tendré que refugiarme de los ojos que me intuyen
esas ganas de abandonarme al hambre tan cansino de los bichos
que es deshonra desear caerse al hoyo
mientras todos lloran celebrando seguir vivos.


poema: argi azor
ilustración: po poy

4 comentarios:

dani sanchis dijo...

Existen asideros estratégicamente situados (en los accesos e interior) para facilitar las operaciones de entrada/salida y sentarse/levantarse.

Anónimo dijo...

marlon omar coyopay dijo un día

este polígono vivo,
ondulado como un charco
al que le acuden zapatos,
poco parece un triángulo
si con nada lo medimos.


el de hoy me gusta, pero soy fan de marlon omar cocopay

dijo...

http://www.goear.com/listen/e51e127/rap-escolar-.

Anónimo dijo...

Joder me encanta el poema! es magnifico!